El acceso al mercado laboral ha sido históricamente complicado para los jóvenes en México, pero los millennials y la generación Z enfrentan retos adicionales debido a los cambios estructurales en la economía y las particularidades de sus formaciones. Uno de los mayores desafíos que estas generaciones han tenido que enfrentar, además del confinamiento por COVID-19 durante sus años formativos, es la falta de experiencia laboral formal, algo que se ha visto exacerbado por la pandemia y las nuevas formas de trabajo que han surgido en los últimos años. A continuación, exploramos cómo este problema afecta a su empleabilidad y cómo las empresas pueden adaptarse para incluir a estas nuevas generaciones en su plantilla.
Retos de la empleabilidad de jóvenes millennials y generación Z en México
En la actualidad, muchos jóvenes, especialmente aquellos de la generación Z, se encuentran con un obstáculo recurrente al intentar ingresar al mercado laboral: la falta de experiencia. Durante la pandemia, la imposibilidad de trabajar en entornos tradicionales, como oficinas o fábricas, les impidió adquirir la experiencia que muchas empresas exigen para poder contratarlos. Este escenario ha creado una situación en la que los jóvenes no pueden obtener empleo por no tener experiencia, pero no pueden adquirir esa experiencia porque no encuentran un empleo que se ajuste a sus habilidades emergentes.
Durante una mesa de análisis en Imagen Radio con Fernanda Familiar en ¡Qué tal Fernanda!, donde entre los participantes se encontraba Jesús Moscoso, abogado especialista en temas laborales y CEO de ESSAD, hizo hincapié en que este es un desafío significativo. "Los jóvenes de hoy no tuvieron la oportunidad de integrarse plenamente en el mercado laboral durante la pandemia", comenta Moscoso. "Esto afecta gravemente su capacidad para demostrar compromiso y habilidades en un entorno laboral formal, lo que reduce sus oportunidades de empleo."
Características clave de la generación Z en el trabajo
Un aspecto clave que resalta sobre la empleabilidad de millennials y generación Z en México, es cómo las empresas perciben a los jóvenes, especialmente a los de la generación Z, quienes a menudo son vistos como disruptivos y proactivos. Sin embargo, estas mismas características pueden verse como falta de compromiso o desinterés en seguir estructuras tradicionales de trabajo, lo que aumenta la brecha entre ellos y los empleadores más convencionales.
Ricardo Wals, asesor de ventas en Otob México, señala que muchas empresas, al no ofrecerles oportunidades, están llevando a los jóvenes al autoempleo. Aunque el emprendimiento y el trabajo independiente han crecido, no siempre garantizan un futuro estable. "Es cierto que los jóvenes hoy en día están buscando alternativas, pero no todas las opciones son sostenibles en el largo plazo", explica Wals.
Por otro lado, Daniel Mijangos, agente de seguros de Aarco, observa que en ciertos sectores, como el de seguros, la edad promedio de ingreso es mucho mayor. "En el sector asegurador, la media de edad de ingreso ronda los 37 años, lo que dificulta la inclusión de los más jóvenes. Sin embargo, con el aumento de capacitaciones en línea y la adaptación del sector, hemos logrado incluir a generaciones más jóvenes, aunque no es la norma."
La generación Z: una nueva forma de trabajar
Uno de los retos más grandes para los jóvenes es adaptarse a las expectativas laborales tradicionales. A diferencia de las generaciones anteriores, los millennials y la generación Z crecieron en un entorno dominado por la tecnología, lo que les ha permitido desarrollar habilidades digitales y tecnológicas desde una edad temprana. Sin embargo, esta competencia técnica no siempre es suficiente cuando se trata de cumplir con las normas empresariales tradicionales, como el trabajo presencial, la puntualidad y las jerarquías estrictas.
Según el INEGI, el desempleo en los jóvenes de entre 15 y 29 años es alarmante, con tasas de subempleo más altas que otros rangos de edad. "Los jóvenes de la generación Z no solo enfrentan barreras por falta de experiencia, sino que también se topan con percepciones erróneas por parte de los empleadores. Muchos consideran que carecen de compromiso y de la capacidad para integrarse en la estructura laboral tradicional", comenta Moscoso.
Soft skills y su importancia en el mercado laboral actual
Otro punto crucial en la discusión sobre la empleabilidad de estas generaciones es la necesidad de soft skills o habilidades blandas. Aunque los millennials y la generación Z suelen destacar en competencias tecnológicas, se ha señalado que muchas empresas aún perciben una falta de habilidades interpersonales, como la comunicación, la empatía o la capacidad de resolver conflictos.
Moscoso enfatiza que estas habilidades blandas se han vuelto cada vez más importantes en el proceso de reclutamiento. "Los jóvenes deben desarrollar una combinación equilibrada de habilidades técnicas y blandas para poder adaptarse a las exigencias del mercado laboral actual. La generación Z tiene características únicas, pero también deben estar dispuestos a aprender y adaptarse a las expectativas de las empresas."
El futuro de la empleabilidad para millennials y generación Z
A pesar de los retos que enfrentan, estas generaciones tienen la ventaja de estar al tanto de las nuevas tecnologías y métodos de trabajo flexible. Aunque algunos optan por el emprendimiento, otros se esfuerzan por encontrar trabajos formales que les permitan aplicar sus conocimientos y habilidades en entornos laborales más tradicionales. Sin embargo, las empresas también deben adaptarse para poder integrar a estos jóvenes talentos, ajustando sus procesos de contratación y formación.
En última instancia, la empleabilidad de los millennials y la generación Z dependerá de un esfuerzo conjunto: los jóvenes deben mejorar sus soft skills y buscar formas de adquirir experiencia, mientras que las empresas deben actualizar sus modelos de trabajo para ser más inclusivas y flexibles, aprovechando las fortalezas de estas generaciones.
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