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Lo barato sale caro: El alto costo de la informalidad laboral en México

En el contexto laboral actual, la formalidad es un tema recurrente y relevante, especialmente en México, donde los derechos laborales y la situación de los trabajadores han captado la atención de líderes empresariales y la opinión pública.


Gracias a las plataformas digitales, se ha evidenciado la situación de miles de personas que laboran en condiciones de informalidad, es decir, fuera del marco regulado por la Ley Federal del Trabajo (LFT). 


La informalidad laboral en México 


En México, el índice de informalidad laboral es alarmante; según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), alrededor del 55% de los trabajadores se encuentran laborando informalmente, lo que significa que no cuentan con seguridad social, prestaciones, o contratos formalmente establecidos (INEGI, 2023).  


Cuando pensamos en la informalidad, solemos asociarla únicamente con los oficios y trabajos independientes, pero lo cierto es que muchas empresas formalmente constituidas también operan bajo esquemas informales, adoptando prácticas como el pago en efectivo de nóminas, la exención del ISR para los trabajadores o el uso de regímenes fiscales que no corresponden a la naturaleza de la actividad laboral. 


Consecuencias de la informalidad laboral 


Estas prácticas pueden parecer, a simple vista, una forma rápida y fácil de reducir costos operativos. Sin embargo, a largo plazo, la informalidad representa un riesgo significativo tanto para la empresa como para el trabajador. Algunos de los problemas que la informalidad laboral genera incluyen: 


  1. Inseguridad social: Al no estar formalmente registrados, los trabajadores no tienen acceso a la seguridad social, quedando vulnerables ante enfermedades, accidentes y situaciones de emergencia. 

  2. Conflictos laborales: La ausencia de contratos formales dificulta la resolución de conflictos laborales, exponiendo a las empresas a potenciales demandas y reclamaciones por parte de los empleados. 

  3. Falta de protección en caso de accidente o riesgo laboral: Si un trabajador no está formalmente registrado y ocurre un accidente, la empresa puede enfrentar graves consecuencias legales y económicas, además de afectar la reputación corporativa. 

  4. Inestabilidad en la plantilla laboral: La falta de estabilidad y protección hace que los trabajadores en condiciones informales busquen mejores opciones, aumentando la rotación de personal y afectando la productividad de la empresa. 

  5. Sanciones legales y fiscales: El incumplimiento de la normativa laboral puede derivar en multas, sanciones y auditorías por parte de las autoridades fiscales y laborales. 


En Essentia Advisory, nos encargamos de ayudar a las empresas en el proceso de transición hacia la formalidad laboral, proporcionando asesoría e implementación que les permitan cumplir con las disposiciones legales, ofrecer un ambiente seguro y estable a sus colaboradores y contribuir a una economía más sólida y equitativa. La creencia de que la informalidad es una vía para reducir costos es errónea; cuando surge algún problema, como un accidente laboral, la ausencia de seguridad social y de contratos formales pueden resultar en costos mucho mayores para la empresa. 


De cara al 2025, la formalidad laboral no solo será una tendencia, sino una necesidad para garantizar la sostenibilidad y el desarrollo de las empresas en México. Trabajar en la formalidad refleja un compromiso de responsabilidad social y respeto hacia quienes son el motor principal de cualquier organización: sus colaboradores. 



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